La mujer de un solo hombre. A.S.A. Harrison

La mujer de un solo hombre

A.S.A. Harrison

A.S.A. Harrison era una canadiense que escribió cuatro obras de no ficción y esta única novela que se convirtió inmediatamente en un éxito internacional. Aclamada como un acertado thriller psicológico se tradujo a veintinueve idiomas. Poco después de su publicación murió en Toronto en 2013.

La novela es una inquietante indagación en la fragilidad de una pareja, pero también, y sobre todo, una historia de suspense.

 

Si la pareja ideal existiese, Jodi y Todd serían un modelo del género. Tras más de veinte años juntos, viven en Chicago en un amplio apartamento situado en la planta 27, con unas vistas espectaculares al lago Michigan. Todd posee una pequeña empresa constructora y Jodi, psicoterapeuta, puede permitirse trabajar unas pocas horas al día recibiendo a sus pacientes en casa. El resto del tiempo se dedica a sus clases de Pilates, a cocinar platos exquisitos y a pasear a Freud, su adorado golden retriever. Sin embargo, la idílica relación entre Jodi y Todd parece tener algún punto vulnerable. Aunque ninguno de los dos sea consciente de ello, ciertos hechos amenazan con estropear su apacible existencia. Y cuando por fin Jodi reconoce que su vida se está yendo a pique, la sensación de haberlo perdido todo se apodera de ella y un abismo de sombrías posibilidades se abre ante sus ojos. 

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Cuando la sinopsis de la editorial señala que la pareja de Jodi y Todd podría ser un modelo de género, no se lo crean. En su vida diaria,  nunca encontrarán una pareja así. 

Me explico.

En primer lugar llevan veinte años juntos y no están casados. No tienen hijos porque ella no quiere (él sí querría, pero ya veremos cómo es "él"). En ningún punto de la novela se habla del amor. Se tratan otras cosas importantes en una pareja como es la comodidad o la armonía, pero no de éste tema. Cuando surge la ruptura, ninguno de los dos se conduce como hubiéramos previsto.

Vayamos por partes. La protagonista es Jodi. Psicóloga seguidora de las tesis de Albert Ellis de la terapia racional emotiva conductual. (Luego veremos lo que el libro nos enseña sobre tal terapia). Hija de un farmacéutico y una ama de casa soñadora, de religión católica, parece que ha tenido la mejor de las infancias y adolescencias. Ella se siente segura, sin traumas, sin problemas económicos y con sus propios ingresos de una consulta reducida pero selecta. 

Todd, es bastante diferente. Hijo de un borracho maltratador, ha tenido la suerte y la voluntad de hacerse a sí mismo y lleva una pequeña pero boyante constructora dedicada a la restauración y posterior venta de edificios antiguos en el centro de Chicago. 

Su mujer describe su conducta como:

"Todd, en muchos aspectos es un crio, en términos freudianos, un caso de interrupción del desarrollo psicosexual, un niño de cinco años en fase fálica, preocupado por el ascendiente sexual, enamorado todavía de su madre, que sublima su deseo hacia otras mujeres. Todd no es muy dado a reflexionar sobre sí mismo y no suele tener en cuenta sus defectos. Aunque a su favor hay que añadir que tampoco tiene en cuenta los defectos de los demás."

Todd tiene "aventuras". Para él son como un deporte, un pasatiempo que no afecta a su modo de vida ni hace que pierdas la cabeza. Jodi sabe de estas aventuras. El sabe que ella lo sabe. Pero todo sigue discurriendo placenteramente... hasta que Todd se enamora de una chica de 20 años, hija de su mejor amigo y ... se deja arrastrar hasta embarazarla.

Jodi había contemplado  siempre su relación de pareja con serenidad. Gracias a Albert Ellis aprendió que una vida tranquila requiere una serie de acuerdos basados en la aceptación de las personas que te rodean, con sus necesidades individuales y sus idiosincracias que no siempre podemos adaptar a nuestros gustos. Las personas viven su vida, se expresan y buscan la satisfacción a su manera y en su momento. Las personas no están aquí para satisfacer nuestras necesidades ni cumplir nuestras espectativas ni nos tratarán bien siempre. Ella tiene asumido que las personas no cambian, es decir, no mejoran, sino que empeoran.

Con semejante planteamiento (aparentemente frio y racional) no es extraño que la pareja se mantenga estable. No importa el que Todd vaya de flor en flor porque lo fundamental es la fachada. Que se mantenga la importantísima fachada. La ilusión de que todo va bien y no pasa nada. Mientras los hechos no sean declarados abiertamente, mientras él hable con ella con eufemismos y circunloquios, mientras las cosas funcionen sin contratiempos y prevalezca una apariencia de calma, podrán seguir viviendo com siempre.

Todd es bastante simple, pero entiende lo básico de este planteamiento. Su vida con Jodi pertenece a un plano que no tiene nada que ver con Natasha (la casi adolescente experta en manipulación de seres como él). Con Jodi tiene un universo paralelo donde las cosas funcionan a la perfección y seguirán haciéndolo. Donde los años sin tacha se extienden dulcemente hacia el pasado y cómodamente hacia el futuro.

Todo ésto está muy bien (o no, pero aceptemos el planteamiento de la novela) pero empieza la presión de Natasha por el embarazo, las exigencias de una boda... y Todd no está preparado para resistir semejante envite. Se plantea (en medio de grandes dudas) ir a vivir con la hija de su amigo (que cuando lo sabe, se lo llevan los demonios).

Cuando tiene lugar esta marcha, Jodi no padece por su ausencia. A menudo él volvía a casa cuando ella ya se ha dormido y normalmente se marchaba antes de que ella despertara. 

Lo que más le afecta es el transtorno en su rutina. Ello la deja sin saber qué hacer.

Pero conoce a Todd y sabe que volverá.

Pero cuando no vuelve. Cuando ella descubre que en el Estado de Illinois no se reconoce el matrimonio de hecho y que él puede desahucirla sin más. Que puede quedarse sin tarjetas de crédito y en la p. calle... entonces es cuando aparece lo que hay debajo de la psicóloga equilibrada.

Entonces es cuando planea matar a Todd.

Y aquí lo dejo porque, a partir de este punto es cuando la trama discurre por otros parámetros que no estaría bien descubrir.

Aunque me parezca sorprendente el contenido de este thriller, debo reconocer que es bastante (o más que bastante) entretenido.

Con semejante planteamiento